sábado, 11 de diciembre de 2010

El papel del Estado: el análisis positivo.

Antes hemos estado analizando el análisis normativo del Estado,el cual se encargaba de explicar que debería hacer el Estado, y a continuación vamos a estudiar el análisis positivo, el cual se encarga de describir y explicar tanto lo que hace realmente el Estado como sus consecuencias.


El popular enfoque basado en los fallos del mercado ha llevado a untilizarlos para justificar muchos programas estatales. A menudo hay una gran diferencia entre el objetivo declarado de un programa  y su diseño. Lo que ocasiona que no se logre el objetivo que inicialmente se fijó, obteniendo unas consecuencias nefastas. Para comprender más fácilmente los verdaderos objetivos del programa, sería preferible observar sómo se diseñan y se llevan a la práctica, que analizar los objetivos teóricos declarados por la ley.


Algunos economistas piensan que la economía debe centrarse en el análisis positivo, en la descripción de las consecuencias de los programas públicos y la naturaleza de los procesos políticos, que en el análisis normativo. En cambio, los análisis de los economistas del papel que debe desempeñar el Estado constituye un elemento importante del proceso político en las democracias modernas. Al margen de todo esto, el análisis de los mecanismos institucionales puede llevar a diseñar procesos que mejoren la probabilidad de que las decisiones públicas reflejen un conjunto más amplio de intereses públicos y no ssólo intereses especiales.


http://www.econlink.com.ar/analisis-positivo-y-normativo

El papel del Estado: el análisis normativo.

El papel del Estado se puede estudiar desde dos tipos de enfoques diferentes, a continuación nos vamos a centrar en el enfoque normativo, el cual se ocupa de lo que debería hacer el Estado.
Los teoremas fundamentales de la economía del bienestar son útiles porque definen claramente el papel del Estado. Si no hubiera fallos en el mercado ni bienes preferentes lo único que tendría que hacer el Estado sería ocuparse de la distribución de la renta .


Si hay fallos importantes en el mercado, como son los estudiados a lo largo de las diferentes entradas: competencia imperfecta, bienes público, información incompleta, externalidades, etc, el mercado no es eficiente desde el punto de vista de Pareto, lo cual justifica la intervención del Estado. A pesar de ello, cabe destacar:
  • Por un lado, hay que demostrar que existe una forma de intervenir en el mercado que mejora el bienestar de alguna persona, sin empeorar el de ninguna otra, es decir, se trata de realizar una mejora en el sentido de Pareto.
  • Por otro lado, hay que demostrar que el propio proceso político real y la estructura burocrática de una sociedad democrática son capaces de corregir el fallo del mercado y de lograr una mejoría en el sentido de Pareto.

Cuando la información es imperfecta, tiene unos costes, los cuales son los mismos tanto para el Estado como para las empresas privadas. Para averiguar si el mercado es eficiente desde el punto de vista de Pareto, debe de tenerse en cuenta estos costes de la información.
El Estado no sólo se enfrenta a los costes de los diferentes fallos de mercado, sino también a los costes de la creación y de la gestión de los programas públicos.
Diferentes investigaciones han identificado una serie de circunstancias en las que aun suponiendo que el Estado no tiene ninguna ventaja en la información o en los costes de transacción frente al mercado privado, su intervención podría lograr, una mejora en el sentido de Pareto.
También debemos comprender cómo funciona la administración  pública real si queremos saber qué probabilidades tiene la intervención del Estado de remediar los fallos del mercado.


Los programas públicos, incluso aquellos cuyo supuesto objetivo es atenuar algún fallo del mercado, no son instituidos en las democracias por Gobiernos ideales, sino por complicados procesos políticos.


http://sociologia.uahurtado.cl/publicaciones/Informe_UAH_Infancia_1.pdf

http://www.lexureditorial.com/boe/0907/11930.htm

http://www.mex.ops-oms.org/documentos/seguridad/carlosrivaseguridadvial.pdf

La redistribución y los bienes preferentes.

Anteriormente, hemos estado explicando los diferentes fallos del mercado que impiden que la economía sea eficiente sino interviene el Estado, a continuación estudiaremos dos situaciones en las que el Estado interviene aunque éste sea eficiente: distribución de la renta y los bienes preferentes.


En primer lugar, esta la distribución de la renta; el echo de que la economía sea eficiente no significa que la renta este distribuida equitativamente, de echo las economías competitivas pueden generar una distribución de la renta muy desigual, haciendo que unos tengan mucho y otros muy poco. Por todo esto, una de las actividades más importantes del Estado es redistribuir la renta y transferir recursos de los que más tienen a los que menos tienen. Un problema de estas transferencias de recursos es la pérdida de alguno de ellos durante el proceso, lo cual provoca una disyuntiva entre la eficiencia y la equidad.
La disyuntiva entre la equidad y la eficienca constituye el núcleo de muchos de los debates sobre la política pública : ¿A cuánta eficiencia tengo que renunciar para reducir la desigualdad?.
Además por otro lado, existen discrepancias sobre el valor que debe asignarse a una disminución de la desigualdad en comparación con una disminución de la eficiencia. Para unos la desigualdad es el problema fundamental de la sociedad, mientras que para otros los es la eficiencia.

 A conitnuación se muestra una tabla de cómo se distribuye la renta por CC.AA. y para diferentes actividades:




Sabemos que todo el mundo, o la mayoría tienen una percepción diferente de su propio bienestar, lo cual provoca que éste no sea un criterio objetivo par determinar qué aumenta el bienestar social y qué no. Por todo ello, estamos hablando en segundo lugar, de los bienes preferentes: aquellos que el Estado nos obliga a consumir.
 Debido a la no objetividad de los individuos, es el Estado quien debe intervenir en esas situaciones en las que los consumidores no hacen lo que más les conviene, además dicha intervención no debe limitarse únicamente a suministrar información.
La idea de que el Estado debe intervenir porque sabe qué es lo que les conviene a los ciudadanos se denomina paternalismo. En contra de esta idea paternalista, hay muchos economistas que creen que el Estado debe respetar las preferencias de los consumidores; además temen que una vez que el Estado asuma un papel paternalista, los grupos de presión intenten utilizarlo para defender sus propias ideas sobre la forma en que deben actuar o sobre lo que deben consumir los individuos. La idea de que el Estado no debe intervenir en las decisiones de los individuos se llama pensaminiento libertario.


 La educación es un bien preferente: a continuación se muestra la evolución del gasto público destinado a la educación en los diferentes paises europeos:




 
Existen dos importantes advertencias sobre la postura general de los economistas contra el paternalismo del Estado:
  • Los niños: sabemos que alguien debe de tomar las decisiones por ellos, el problema reside en quién debe realizar esta tarea. Algunos piensan que deben de ser los padres los que realicen esta actividad, mientras que otros piensan que debe ser el Estado quien se encargue de proporcionarles una educación, etc. La solución a esta situación es un reparto equitativo de las tareas entre ambos, donde el Estado se encargaría de las actividades básicas y los padres del resto.
  • Situaciones en las que el Estado no puede comprometerse: son aquellas situaciones en las que las personas toman malas decisiones y el Estado debe abstenerse de intervenir, pero termina interviniendo por compasión, imponiendo o fomentando una conducta precavida.

http://www.elpais.com/articulo/opinion/Estamos/hablando/realmente/pensiones/elpepiopi/20101210elpepiopi_5/Tes

http://personales.unican.es/cantared/TEMA%2010.%20TRANSPARENCIAS.%20PDF.pdf

http://www.attac.es/distribucion-de-la-renta-y-estabilidad-macroeconomica/

viernes, 10 de diciembre de 2010

El paro, la inflación y el desequilibrio.

El paro probablemente sea le fallo de mercado más importante para una economía y para todos los países.
Las situaciones de recesiones o depresiones se han producido por lo diferentes países capitalistas durante las dos últimas décadas, tal vez debido en gran medida a la política económica seguida por los Gobiernos, en el área de la OCDE la tasa de paro ha girado a principios de los años ochenta en torno al 10%, aun así esta tasa es muy baja, en comparación con la Gran Depresión, en que llegaron a alcanzarse incluso niveles de un 20%y un 30%.
En Europa las tasas de paro se han mantenido persistentemente altas, superando en algunos casos el 15 o incluso el 20%.
La mayoría de los economistas se basan en estos niveles para admitir que algo no funciona bien en el mercado, y esta es la prueba más evidente.

La inflación(subida generalizada y persistente de los precios) también se encuentra entre uno de los fallos del mercado más graves.


 

Evolución anual del IPC




Tanto el paro como la inflación son los dos elementos bases que justifican la intervención del Estado para corregir los desequilibrios.

 


http://www.diarioya.es/content/el-paro-se-elevar%C3%A1-en-espa%C3%B1a-al-171-en-2010-y-la-inflaci%C3%B3n-18




http://www.eluniversal.com.mx/primera/34218.html




http://www.lne.es/economia/2010/12/04/banco-espana-alerta-situacion-extrema-miles-familias-debido-paro/1003290.html





Fallos de la información.

Otro fallo de mercado es la falta de información o información incompleta, la cual crea situaciones de desventaja entre los agentes del intercambio y en la economía en general.
Algunas actividades del Estado se justifican porque los consumidores tienen una información incompleta, e incluso porque el mercado por sí solo suministra muy poca información. Frente a esta situación, los Gobiernos se han visto obligados a estableces normas que exigen a los fabricantes a poner unas etiquetas mucho más completas, donde se incluya la fecha de caducidad, valores nutricionales, etc. Los enemigos de estas normativas dicen que son innecesarias, irrelevantes (ya que muchas veces los consumidores prestan poca atención a estos datos) y costosas, tanto para el Estado como para las empresas.


La intervención del Estado para corregir estos fallos de la información va más alla de estas simples medidas. La información en muchos aspectos es un bien público, dado que el echo de que un individuo más sea informado no implica que el resto vaya a estar menos infomado; para que la información sea eficiente se requiere que su difusión sea gratuita y más precisa. El mercado privado en muchas ocasiones proporciona información insuficiente, dando lugar a la falta de información y a las anteriormente explicadas asimetrias de información.
Muchos de los problemas del sector sanitario, de los mercados de seguros o de capitales reside en los problemas de la información .


El echo de proporcionar información y la propia información en sí supone unos gastos, donde los más importantes son los gastos en I+D+i. Una vez más, los teoremos fundamentales de la economía de bienestar, que forman la base de nuestra creencia en la eficacia de las economías de mercado, suponen simplemente que hay un estado dado de información sobre tecnología, evitando la cuestión de la forma en que la economía asigna recursos a la investigación y el desarrollo.
La investigación y el desarrollo cumplen en la mayor parte de las ocasiones las dos propiedades que caracterizan a un bien público. Si suministramos información a otras personas ya hemos visto que no disminuye la cantidad total de conocimientos existentes; pero si los conocimientos se suministran gratuitamente, a nadie le compensa reducirlos. Por lo tanto, el Estado debe contribuir a la producción de conocimientos apoyando directamente la I+D, o debe asegurarse que las empresas que lo producen sean compensadas por ello.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Mercados incompletos.

La existencia de mercados incompletos es otro fallo de mercado, el cual se produce cuando los mercados privados no suministran un bien o un servicio, aun cuando el coste de suministrarlo sea inferior  a lo que los consumidores están dispuestos a pagar; un mercado completo suministraría todos los bienes y servicios cuyo coste de suministrarlo fuera inferior al precio que los consumidores estan dispuestos a pagar.


Los mercados incompletos son muy frecuentes en los mercados de seguros y de capitales:
  • Mercado de seguros: hay ocasiones en las que el mercado privado no suministra un seguro para muchos riesgos importantes a que se enfrenta la gente. Por ello, los Gobiernos se han visto obligados a a proporcionar una gran variedad de seguros, motivados por este fallo de mercado. Entre los principales seguros proporcionados por los Gobiernos se encuentran: fondos de garantías, seguros contra inundaciones, seguros para víctimas de atentados, seguros para agricultores, etc.
http://www.mgap.gub.uy/opypa/ANUARIOS/Anuario08/material/pdf/43.pdf

  • Mercados de capitales: el Estado también se ha visto obligado a intervenir en este tipo de mercados para corregir las imperfecciones que en él se dan. Se han propuesto tres respuestas a estas imperfecciones: la innovación (constantemente estan entrando en el mercado no solo nuevos productos, sino también nuevos modos de funcionamiento de la economía, innovaciones en la creación de nuevos mercados ); costes de transacción (gestionar los mercados, velar por el cumplimiento de de los contratos e introducir nuevas pólizas de seguro tiene costes. Además no existe ninguna proteccion eficaz basada en patentes, por lo que la inversión en innovación es insuficiente); y por último se encuentran las asimetrías de información y los costes de velar por el cumplimiento de los contratos (tanto en el mercado de seguros como en el de capitales ocurre que una de las dos partes que realizan el intercambio posee más informacion que la otra, dando lugar a las llamadas asimetrías de información,  y en el caso del mercado de seguros la parte desinformada suele coincidir que es la compañía de seguros; mientras que en el caso del mercado de capitales suelen ser los prestamistas, los cuales temen no recuperar el dinero, este problema es especialmente importante en el caso de los préstamos en los que no existe ninguna garantía de ser devueltos). El Estado también se enfrenta a costes de transacción y a los problemas para hacer respetar los contratos y a las asimentrías de información.
http://www.youtube.com/watch?v=7ovqteBNES4&feature=fvst


Por último estan los mercados complementarios, los cuales existen para complementarse uno al otro. Actuando cada uno por separado ninguno de los dos prodría servir al interés del público, pero sí actuando conjuntamente. En estos mercados la coordinación  se puede dar sin la intervención del Estado, pero hay ocasiones en las que es necesaria una coordinación a gran escala y es cuando el Estado se ve obligado a intervenir.


http://www.cristian-baeza.com/Papers%20in%20the%20WEB/Ajuste%20de%20Riesgo%20en%20LAC.pdf

Las externalidades.

Una externalidad es cualquier actividad que puede afectar positivamente o negativamente a otros sin que estos paguen o sea compensados por ello. Puede ocurrir que una empresa imponga un coste a otras personas pero no las compensa, o que una empresa genere un beneficio a otras, pero no recibe ninguna retribución a cambio. Estas externalidades pueden ser positivas o negativas.
Las externalidades positivas son aquellas en las que el acto de una persona beneficia a otras, un ejemplo puede ser que una persona decida en su casa poner un jardín muy bonito, esto es agradable para la vista de la gente que pasa por ahi y lo ve y para los vecinos, es decir, reporta algo positivo a estas terceras personas pero no reciben ningún tipo de retribución a cambio.


Ejemplo:


Las externalidades negativas son aquellas en las que el acto de una persona impone costes a otras, un ejemplo sería el tabaco, el echo de que una persona encienda un cigarrillo supone un coste en salud para el resto de personas que lo respiran, sin que ellas lo hayan decidido, es decir es impuesto por la persona que enciende el cigarrillo.


Siempre que hay actividades que generan externalidades negativas, la asignación de los recursos que realiza el mercado puede no ser eficiente. Como no recae sobre los individuos la totalidad del coste de las externalidades negativas que generan, las realizan en exceso; mientras que por el contrario, como los individuos no reciben todos los beneficios de las actividades que generan externalidades positivas, realizan demasiado pocas.
Una importante clase de externalidad es la que se deriva de lo que se denomina problemas de los recursos comunes. Se caracterizan porque se refieren a un grupo de recursos escasos cuyo acceso no esta restringido. Ejemplo: supongamos que hay un lago en el que el número de peces capturados aumenta con el número de barcos de pesca, pero menos que proporcionalmente, por lo tanto, el número de capturas por barco disminuye conforme aumenta el de barcos. Cada barco adicional reduce las capturas de otros barcos. Se trata de una externalidad; el beneficio social marginal de un barco adicional es, pues, menor que la captura media de cada barco. El rendimiento privado que obtendría un individuo más que estuviera pensado en la posibilidad de adquirir un barcos es simplemente el rendimiento medio, que es muy superior al rendimiento social marginal. La eficiencia social requiere que el rendimiento social marginal sea igual al coste de un barco.


Las soluciones del sector público para resolver las externalidades relacionadas con el medio ambiente se dividen en dos grandes clases: las soluciones basadas en el mercado y la regulación directa.
  • Las soluciones basadas en el mercado intentan influir en los incentivos para conseguir unos resultados económicamente eficientes através de: multas e impuestos (la solución más sencilla consiste en cobrar tasas o impuestos proporcionales a la cantidad de contaminación emitida), subvenciones para la reducción de la contaminación (la empresa realizará un gasto demasiado pequeño  en paliar la contaminación. El Estado, podría subvencionar los gastos que se efectuarán para reducirla. Concediendo una subvención igual a la diferencia entre el beneficio social marginal de la reducción de la contaminación y el beneficio privado marginal de la empresa , podría lograrse el nivel eficiente de gasto en la reducción de la contaminación) y los permisos transferibles (los cuales limitan la cantidad de contaminación que puede emitir cualquier empresa. Las empresas obtienen, pues, un permiso para emitir un determinado número de unidades contaminantes. Como lo que le interesa al Estado es la cantidad total de reducción de la contaminación, permite que las empresas intercambien los permisos, así las empresas que menos contaminen pueden vender sus permisos a aquellas que más contaminen).
  • Las soluciones directas son aquellas en las que el Estado ha decidido intervenir através de la regulación directa: fijando unos niveles de emisión para los automóviles, prohibiendo fumar en los vuelos nacionales e incluso restringiendo la pesca y la caza para reducir la ineficiencia resultante de la excesiva utilización de estos recursos comunes.
http://www.youtube.com/watch?v=M1lFwUJtVxo

http://www.youtube.com/watch?v=CHFKFbnR6Dg

http://es.wikipedia.org/wiki/Protocolo_de_Kioto_sobre_el_cambio_clim%C3%A1tico